Desenfocadas, ambiguas, sobrexpuestas, descontextualizadas, ingenuas, sobreactuadas, involuntariamente cómicas... o extrañamente atrayentes. Así son las fotografías de fantasmas. En ellas se exhiben figuras claramente humanas, humanoides, demoniacas, angelicales, animales, vapores, nieblas, esferas de luz, emanaciones e incluso siluetas totalmente abstractas (en lo personal me sorprende que nunca haya sido "fotografiado" el fantasma de un vegetal, al menos yo no he encontrado ningún ejemplo); las presencias levitan, vuelan o aún están grotescamente ancladas a la gravedad,
Cada una de las imágenes en este post las he encontrado adjudicadas a tres o más historias completamente distintas entre sí, con años e incluso nacionalidades diferentes. En lo personal creo que el hecho de que sean o no falsas es absolutamente intrascendente, salvo en los vergonzosos casos en que interviene el lucro personal, que debería ser duramente castigado. Yo creo que juzgarlas "falsas" o "verdaderas" es quedarse con la mitad de los hechos, la significación está en la mirada del espectador. Estas imágenes son equivalentes a las de un sueño, pertenecen al umbral de lo onírico y del deseo, ¿quién tiene la capacidad de discernir en un sueño qué es real y qué no lo es? Para mí esto es válido incluso en el caso de las fotos netamente fabricadas... si las inquietudes que nos contagian no fueran válidas, un arte como el cinematográfico no engendraría la innegable experiencia vital que, sin duda, es...
Cada una de las imágenes en este post las he encontrado adjudicadas a tres o más historias completamente distintas entre sí, con años e incluso nacionalidades diferentes. En lo personal creo que el hecho de que sean o no falsas es absolutamente intrascendente, salvo en los vergonzosos casos en que interviene el lucro personal, que debería ser duramente castigado. Yo creo que juzgarlas "falsas" o "verdaderas" es quedarse con la mitad de los hechos, la significación está en la mirada del espectador. Estas imágenes son equivalentes a las de un sueño, pertenecen al umbral de lo onírico y del deseo, ¿quién tiene la capacidad de discernir en un sueño qué es real y qué no lo es? Para mí esto es válido incluso en el caso de las fotos netamente fabricadas... si las inquietudes que nos contagian no fueran válidas, un arte como el cinematográfico no engendraría la innegable experiencia vital que, sin duda, es...