Es la Semana Cero de entrega de ocho libros a la imprenta
y pese a la aceleración de los tiempos
de varios títulos
todo está saliendo bien
sí
seguro
y a mí me va... muy bien, todo en orden
yo estoy aquí, ella está allí, ellos están allí
estamos bien ¿no?
pero ¿sabes qué?
al final del día
cuando aparentemente estoy solo
pero en realidad estoy conmigo mismo
enfrentando la verdad desnuda
que es ciega, sorda y muda
y que extiende sus manos heridas
hacia mí
y desde sus ojos vacíos
y su boca abierta
vislumbro un abismo
sediento
hambriento
insaciable
sé
que en realidad
esta calma
es aparente
y conozco
(porque veo las cosas
desde su interior)
lo espantosamente frágiles
que son en realidad
y que una palabra
mía
suya
tuya
o un silencio
en el momento y lugar
preciso
podría derribarlo todo
(y sé
que a veces
eso es exactamente
lo que más deseo)
Al final del día
descubro
que los demonios
son más reales que nunca
Y cada mañana
descubro
que los demonios
son más falsos que nunca...
Imagen: Anupong Chantron Distress of Place
