Pero, detrás de ese velo de dulzura y de calma
la noche galopa
y caerá sobre nosotros
¡ptac!, así
en el momento en que menos lo esperemos.
Esto es lo que sucede en esta puta tierra.
--Puesto que estamos prevenidos
--Podemos aguardar pacientemente.
--Ya sabemos a qué atenernos.
--No tenemos por qué inquietarnos.
--Sólo hay que esperar.
--Estamos acostumbrados...
[SAMUEL BECKETT, ESPERANDO A GODOT]